Se vende en 3 diferentes motorizaciones, aunque la única que
vale la pena es la más potente, el 2.0 lt. turbo, que entrega 180 BHP y
velocidades máximas de 215
km/h y 8.5 seg para acelerar de 0 a 100.
El estilo respeta las características de los nuevos diseños
de la marca francesa, que llegan a disgustar a muchos. Éste, a diferencia del
Sandero o Duster, se siente más agradable, elegante y hasta deportivo.
El único problema son las dimensiones: 4.6 mt de largo y 1.8
de ancho. Mencioné que el mejor motor era el más poderoso, ya que es el
único de recuperar el tiempo que éste enorme barco se pasa chocando, y así no
llegar tarde a lugares.
En el Salón de Frankfurt de 2009 se presentó la versión
eléctrica: el Fluence Z.E, el cual ya está en venta en ciertos lugares del
mundo. El Z.E. planea ser más practico que los actuales eléctricos, ya que como
es sabido, las baterías tienen poca autonomía, tardan mucho en
cargarse y son caras para cambiar (aparte del hecho de que la mayoría de las
calles del mundo no están preparadas para vehículos a electricidad).
A pesar del tamaño, el Fluence es un buen vehículo en el que
el precio, lujos y comodidad van de la mano en equilibrio.
Para mi gusto personal es muy grande, pero a mucha gente le gusta este estilo de coches.
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