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Como todos ya sabemos, los suecos de Koenigsegg están totalmente desquiciados. Y si tenías alguna duda, sólo basta observar su última creación, el Agera, para asegurarse. Llamado como el dialecto sueco que significa "Acción", esta belleza sueca quema gasolina y despide perfección.
El Agera posee un V8 twin-turbo de 5.0 L, que libera unos considerables 927 HP (939 CV). La velocidad de 0 a 100 es de 3 segundos, camino a los 390 km/h de velocidad máxima.
El Agera R del 2011 tiene el mismo V8, pero libera 1.115 HP (1.130 CV), viaja de 0 a 100 en 2.9 seg y supera los 420 km/h, aunque esto nunca ha sido probado. De hecho, los ingenieros de Koenigsegg dicen que supera los 440 con neumáticos especiales.
Si pensaste que los suecos no podrían superar su auto del 2011, estás muy equivocado. En 2012, la marca presentó un Agera R 2013. Con el mismo motor (que pasó por unos mínimos cambios a lo largo de los años), el modelo del 2013 podría llegar a los 1.140 HP (1.156 CV), acelerando de 0 a 100 en 2.9 segundos. Sí, exactamente que la versión anterior. Pero la maravilla se encuentra en la velocidad máxima: 439 km/h. Es decir que, si las cifras son verdaderas, el Agera R se convertiría en el auto más rápido del mundo. Hay que esperar que Koenigsegg confirme que las cifras en papel sean iguales a las de la realidad.
El diseño, a pesar de todas las versiones, siempre se mantuvo prácticamente el mismo. Es muy difícil notar los cambios en la carrocería a lo largo de las diferentes versiones, aparte de las distintas pinturas que se usaron. El diseño recuerda mucho al del CCX, que como ya sabemos, está orientado mas que nada a la perfecta aerodinamia. Las grandes tomas de aire generan carga aerodinámica, además de llevar aire para refrigerar la bestia detrás del asiento del conductor. Una de las ideas más inteligentes que los suecos incorporaron a la carrocería es un alerón que no se levanta guiado por la velocidad del auto (como sucede en la mayoría de los superautos), sino por la presión del aire sobre el mismo. Si a mí me preguntan, el diseño del Agera me encanta, ya que refleja esa pasión por la perfección que invade a la marca.
Por dentro, el superdeportivo no parece que tuviera 15.000 HP. En cambio, parece más algo que viniera equipado en un BMW o Mercedes. La sobriedad del interior refleja comodidad, más que velocidad. Ahí es cuando el tablero electrónico toma importancia. Es algo que a mí me enamoró a primera vista. Parece sacado de la película "Yo Robot". Tiene tantas luces, diales, indicadores, barras que no se qué significan pero se van llenando a medida que el auto va más rápido; que le inspiran a uno ganas de ir más fuerte, y no importa nada más en el mundo.
El precio del Agera R del 2011 es de U$D 1.600.000, aunque se puede ir todavía más lejos con opcionales. El del Agera estándar ronda los 1.500.000, y el del Agera R 2013 será anunciado más adelante en el año. Si se busca un auto con el que pueda competir en el mercado, es el Veyron Super Sports, que es hasta mejor dependiendo del cliente.
Me parece que el Koenigsegg Agera R es uno de los mejores autos del mercado mundial, y definitivamente más caros. Pero tengo el presentimiento que, si los suecos se concentran, y ponen lo mejor de ellos; el Veyron pasaría a el segundo lugar de la lista de los autos más rápidos.
El Agera posee un V8 twin-turbo de 5.0 L, que libera unos considerables 927 HP (939 CV). La velocidad de 0 a 100 es de 3 segundos, camino a los 390 km/h de velocidad máxima.
El Agera R del 2011 tiene el mismo V8, pero libera 1.115 HP (1.130 CV), viaja de 0 a 100 en 2.9 seg y supera los 420 km/h, aunque esto nunca ha sido probado. De hecho, los ingenieros de Koenigsegg dicen que supera los 440 con neumáticos especiales.
Si pensaste que los suecos no podrían superar su auto del 2011, estás muy equivocado. En 2012, la marca presentó un Agera R 2013. Con el mismo motor (que pasó por unos mínimos cambios a lo largo de los años), el modelo del 2013 podría llegar a los 1.140 HP (1.156 CV), acelerando de 0 a 100 en 2.9 segundos. Sí, exactamente que la versión anterior. Pero la maravilla se encuentra en la velocidad máxima: 439 km/h. Es decir que, si las cifras son verdaderas, el Agera R se convertiría en el auto más rápido del mundo. Hay que esperar que Koenigsegg confirme que las cifras en papel sean iguales a las de la realidad.
El diseño, a pesar de todas las versiones, siempre se mantuvo prácticamente el mismo. Es muy difícil notar los cambios en la carrocería a lo largo de las diferentes versiones, aparte de las distintas pinturas que se usaron. El diseño recuerda mucho al del CCX, que como ya sabemos, está orientado mas que nada a la perfecta aerodinamia. Las grandes tomas de aire generan carga aerodinámica, además de llevar aire para refrigerar la bestia detrás del asiento del conductor. Una de las ideas más inteligentes que los suecos incorporaron a la carrocería es un alerón que no se levanta guiado por la velocidad del auto (como sucede en la mayoría de los superautos), sino por la presión del aire sobre el mismo. Si a mí me preguntan, el diseño del Agera me encanta, ya que refleja esa pasión por la perfección que invade a la marca.
Por dentro, el superdeportivo no parece que tuviera 15.000 HP. En cambio, parece más algo que viniera equipado en un BMW o Mercedes. La sobriedad del interior refleja comodidad, más que velocidad. Ahí es cuando el tablero electrónico toma importancia. Es algo que a mí me enamoró a primera vista. Parece sacado de la película "Yo Robot". Tiene tantas luces, diales, indicadores, barras que no se qué significan pero se van llenando a medida que el auto va más rápido; que le inspiran a uno ganas de ir más fuerte, y no importa nada más en el mundo.
El precio del Agera R del 2011 es de U$D 1.600.000, aunque se puede ir todavía más lejos con opcionales. El del Agera estándar ronda los 1.500.000, y el del Agera R 2013 será anunciado más adelante en el año. Si se busca un auto con el que pueda competir en el mercado, es el Veyron Super Sports, que es hasta mejor dependiendo del cliente.
Me parece que el Koenigsegg Agera R es uno de los mejores autos del mercado mundial, y definitivamente más caros. Pero tengo el presentimiento que, si los suecos se concentran, y ponen lo mejor de ellos; el Veyron pasaría a el segundo lugar de la lista de los autos más rápidos.
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